La limpieza y el orden en las habitaciones era notable, lo que hizo que la estancia fuera muy agradable.

A veces, el ruido del exterior perturbaba el descanso, especialmente por la noche.

La limpieza del lugar es notable y detallada.

El ruido exterior fue un gran problema durante nuestra estancia, ya que se escuchaban gritos y música hasta altas horas de la noche, lo que dificultó nuestro descanso. Además, la ubicación estaba en un área que no parecía segura, con personas ruidosas y disturbios frecuentes. A esto se sumó que el televisor era muy pequeño y no resultaba cómodo para ver series después de un día largo de turismo.

La habitación tenía un balcón con vistas a la ciudad que hacía que cada café por la mañana se sintiera como un breve respiro en el cielo. El aire acondicionado era tan eficiente que incluso el calor romano se convirtió en mera anécdota, y la ducha, wow, fue como una mini fiesta privada con agua a presión perfecta.

Ruidos ocasionales

La habitación era amplia y muy limpia, excelente ducha. El único problema fue que el televisor era muy pequeño.

Recomiendo para parejas

La habitación era perfecta, era amplia y estaba muy limpia. También, el chico que nos atendió era un encanto y nos ayudó a orientarnos. Sin duda, la limpieza fue de 10, y la tranquilidad del lugar hizo que descansáramos bien por la noche.

Aunque no fue barato, el precio era aceptable por lo que ofrecía.

Ubicación cerca del metro y en una zona tranquila, ideal para descansar. La habitación era amplia y limpia, con una ducha espectacular. El baño contaba con todo lo necesario para una estancia cómoda, y los sándwiches gourmet ofrecidos eran un gran detalle. Sin embargo, el acceso al centro podía ser un poco limitado y el ruido ocasional del exterior era molesto.

Tuve una experiencia fantástica en San Giovanni Retreat. La habitación era cómoda, el aire acondicionado funcionaba perfectamente y la limpieza fue excepcional. Aunque el ruido del exterior a veces era molesto, la cercanía al metro y la belleza del baño compensaron todo. ¡Volvería sin duda!

exploraciones a pocos pasos del coliseo y la fuente de trevi

Disfruté de una increíble estancia que me permitió visitar el Coliseo y la Fontana di Trevi en menos de 30 minutos a pie, mientras me dejaba llevar por las vibrantes calles de Roma, haciendo de cada paseo un auténtico placer. además, el personal del hotel fue muy amable y útil, brindándome información que mejoró aún más mi experiencia en la ciudad.